Viajera temporal del desierto y panameñísima de pura cepa. Esposa de un homo sapiens sapiens y madre de cuadrúpedos. A veces cuasi abogada, otras veces pseudo psicóloga pero siempre, siempre yo misma. En la alegría y en las tristezas, bebedora de whisky y todos los días y noches vampira de colágeno para el alma.
Me dicen: Tita Stark.